El Novio
Una vez un amigo me mandó un mensaje muy angustiado, porque su prima había desaparecido, después de una cita con su novio, entonces, recordamos que frecuentemente el la maltrataba, y deducimos que ella fue víctima de abuso, entonces, vino y me preguntó si podía ir a ayudarlo a rescatarla. Yo le dije que si, por lo que, después de reunirnos en un parque, fuimos a dicha casa.
Al llegar a esa casa, tocamos la puerta 4 veces, pero no conseguimos respuesta, entonces, brincamos la cerca y nos metimos a su patio, pues vivía en las faldas de un cerro. Después de buscar por más de 20 minutos, no hayamon mas que una nota, entre la basura, que mi amigo logró reconocer pues era la letra de su prima, decía que había sido capturada por la familia de su novio y se la habían llevado al otro lado del cerro.
Entonces, sin pensarlo 2 veces, fuimos a mi casa para equiparnos; nos cambiamos de ropa, y en unas mochilas guardamos 2 linternas, 4 paquetes de baterías, comida, unos binoculares, 2 botellas de agua, cuerdas, unos walkie-talkie, y una navaja suiza que tenía mi padre. Entonces salimos hacia la casa del cerro, bajamos del carro de mi amigo y comenzamos a subir dicho cerro. Tardamos 3 horas en lograr cruzar y alcanzamos a ver a lo lejos con los binoculares una cabaña sumamente antigua y una cuatrimoto estacionada junto a ella, por lo que coincidimos en que ella podría estar ahí, entonces, caminamos para allá.
Bajamos lentamente, pero nos dimos cuenta que eran las 7 pm, por lo tanto, la luz del sol estaba disminuyendo y nos iban a atrapar con las linternas prendidas al reflejar de luz, pero eso no impidió seguir descendiendo con éxito. Logramos bajar, pero al casi salir de los arbustos, sin previo aviso salieron 2 personas de la cabaña, y mi amigo las reconoció, pues eran familiares del novio, por lo que nos fuimos a esconder, y al ver que no podíamos seguir ahí por mucho tiempo, nos alejamos en modo sigilo hasta alejarnos lo suficiente.
Había una pequeña choza abandonada cerca del lugar y decidimos montar nuestro refugio mientras rescatábamos a la prima de mi amigo, solo habían 4 camas, una escoba y un recogedor, por lo tanto, decidimos limpiarla para poder dormir.
A la mañana siguiente, escondido, logré trazar un camino de piedras que nos guiarían a la cabaña, sin perdernos en el cerro, y de forma milagrosa, la choza donde estábamos, se encontraba en una zona circundante a los arbustos, que nos llevarían sanos y salvos de regreso al coche.
Comimos y equipados con solo cuerdas y la navaja suiza como medio de ataque, salimos directo a rescatarla. Al llegar, esperamos que todos coincidieran en un mismo lugar, la hora de la comida, para poder entrar por la parte trasera. La cabaña era de 2 pisos y no nos costó trabajo subir y escondernos.
Entonces encontramos a su prima, con una venda en los ojos y boca, y amarrada a una silla, por lo que mi amigo la intentó liberar con la navaja suiza mientras yo hacía guardia en la puerta de ese cuarto con una escopeta que había por ahí. Cuando mi amigo la liberó, en lugar de agradecernos, nos pidió que nos escaparamos de ahí para no levantar sospechas, por lo que cuando bajaron, decidí robarme la escopeta y 6 paquetes de balas que habían ahí.
Cuando menos lo esperamos, a punto de perdernos entre la fauna, escuchamos un grito de ira que nos hizo temblar los huesos, pero nos helamos más al ver a la tía del novio vernos escapar. Sin pensarlo por más tiempo, salimos corriendo mientras oíamos el ruido de la quatrimoto comenzar a perseguirnos.
Llegamos a la choza y lo primero que hicimos fue encerrarnos totalmente, pero dejando un pequeño orificio en la ventana para espiar que todo esté bien.
No pudimos dormir por miedo a que nos encontraran durmiendo y nos hagan daño, entonces, mi amigo tomó la escopeta y la recargó en caso de que algo extraño se acercara a nosotros. Aproximadamente, a las 4 de la mañana, todos estando somnolientos, nos llenó de miedo y a punto del grito escuchar las voces del novio y su padre, por lo que nos escondimos debajo de las camas, y mi amigo, desde un lugar estratégico, apuntó a la puerta por si alguien entraba.
De pronto, comenzamos a oír que alguien tocaba violentamente la puerta, pero no nos atrevimos ni siquiera a asomarnos por el orificio que dejamos, todo iba normal hasta que casi nos desmayamos del susto cuando el señor logró tirar la puerta con ayuda de un machete. A pesar de esto, mi amigo no se atrevió a disparar.
El momento de más pánico fue cuando el señor decidió asomarse por debajo de la cama en donde estaba la prima, cuando ocurrió eso, mi primo le disparó. La detonación alertó al novio quien decidió entrar, y al mismo tiempo, también fue recibido por un disparo. Salimos corriendo del lugar, no sin antes, robar las pistolas que traían ambos sujetos, solo para encontrarnos con el resto de la familia, que armados con piedras, cuchillos y machetes comenzó a perseguirnos.
Decidimos separarnos, a cada uno le dí un walkie-talkie y a la prima le dí una pistola para que se defendiera en caso de que alguien la intente agarrar. Mi amigo se quedó con la escopeta y yo con la última pistola, Nosotros habíamos asistido a una escuela de policías, por lo que sabíamos perfectamente como cargar un arma, así que nos alejamos.
Mi amigo se escondió entre la maleza, la prima entre la niebla y yo entre los árboles y arbustos. Habían pasado 15 minutos después de separarnos cuando sentí que alguien estaba detrás de mí, era el tío del novio, por lo que decidí dispararle en un brazo, y después, salí corriendo. Lo mismo hicieron los demás, mi amigo a una pierna y la prima al pie, del hermano y tía, respectivamente.
Mediante el walkie-talkie, pudimos ubicarnos en la zona circundante a los arbustos, solo para después encontrarnos con los malandros de la pandilla del novio, quien ahora sí llevaban armas de fuego.
Mientras nos escondíamos, escuchamos los disparos que ellos nos lanzaban, mientras que contraatacábamos, logramos herir a uno y eso detuvo la ráfaga de disparos.
Eran las 6 de la mañana cuando la alegría regresó a nosotros, pues llegamos a la casa abandonada, donde estaba el coche, y sin tardar, nos subimos y mi amigo aceleró, para nunca más volver.
Aunque el peligro ya había pasado, la prima se mudó de ciudad, mientras que nosotros solo nos cambiamos de colonia.
Nunca más volvimos a saber del novio.
Comentarios
Publicar un comentario